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0 <<Entrevistamos a Rüdiger tras la publicación de su nuevo álbum “The Dancing King”. Afincado en Bera (Nafarroa) desde 2013, Felix Buff es un digno heredero de su prolífica e inquieta escena musical. No en vano, ha llegado a participar como batería en más de 30 discos en un amplísimo espectro que incluye a bandas como Willis Drummond, Duncan Dhu, Petit Fantôme, Botibol, Rafel Berrio, Joseba Irazoki eta Lagunak o Atom Rhumba. Sin embargo, fue el parón por la dichosa pandemia del COVID lo que nos permitió descubrir un nuevo artista llamado Rüdiger. Y, sobre todo, nos regaló una nueva voz, dulce, sugerente y llena de matices, de la mano de su debut en solitario, “Before It’s Vanished” (2020).>>
¿Quién es Rüdiger para quien no conozca tu proyecto?
Félix: He sido batería desde siempre, he tocado en diversas bandas del País Vasco, como, por ejemplo: “Drummond”, con Joseba Irazoki, con Atom Rhumba, pero también con un cantautor español llamado Rafa Berrio, y en varios proyectos más. Entonces, cuando llegó la pandemia, me hizo tomar un descanso de unos años de tocar en gira, por lo que lo primero que hice fue descansar, que me venía muy bien. Después de tres meses de confinamiento y con la mente tranquila, pues me volvió a picar el gusanillo de estar con la mente en la música. Dado que no tenía la capacidad de llevar a cabo una gira con las bandas que tenía, me puse a buscar en mi disco duro las piezas que no tenían propietarios, y posteriormente, diseñé un álbum con mi hermano como productor. Por consiguiente, hemos tenido la oportunidad de escribir la historia de “Before It ́s Vanished” mi primer álbum que se publicó en 2020.
¿Por qué decides ponerle Rüdiger, que significa para ti?
Félix: Se trata de mi segundo nombre, tengo una familia alemana y soy Felix Rüdiger Buff, por lo tanto, ese es mi nombre completo y no he tenido que buscar demasiado lejos —entre risas—.
Comienzas con tu primer álbum “Before It´s Vanished” ¿Cómo recuerdas esa primera etapa? Ya que me has comentado que nació dentro de la pandemia…
Félix: Pero tenía muchas canciones sin terminar y algunas no habían sido puestas en marcha. Algunas podrían haber sido para Willis Drummond y otras para Joseba Irazoki. Entonces, hicimos una selección de ocho canciones que podrían formar parte de mi primer disco.
Ahora presentas tu nuevo álbum “The Dancing King” ¿Desde cuándo se lleva gestando?
Félix: Este nuevo disco ha tenido más tiempo de producción, de maduración. En un sentido, hemos vuelto a la gira después de la pandemia, lo cual me ha dado lugar a tener menos tiempo para estar en el estudio. Además, mi hermano Johannes Buff ha establecido los estudios Shorebreaker al lado de Bayona y, por lo tanto, comenzaba a tener clientes en el estudio y, por lo tanto, también tendría clientes en el estudio y no había tanto tiempo de poder asistir al estudio. Durante dos años, hemos encontrado momentos libres para estar en el estudio y crear un nuevo álbum. Todo esto requiere que hemos tenido más tiempo, para que las canciones puedan tener su forma final y, además, creo que siempre es beneficioso disponer de tiempo para reflexionar sobre el trabajo que estás llevando a cabo.
Si no me he fijado mal, me he dado cuenta, la portada de del primer disco es más colorida que la de “The Dancing King” que es como más gris…
Felix: Sí, pero en este disco también se encuentra un poco de color arriba en la portada.
¿Qué mensaje tiene el álbum?
Félix: El nombre que he seleccionado para el nombre del disco, es el nombre que indica a una canción del disco “The Dancing King”, una canción que evoca a apoderarse de su propio baile. La verdad es que tenemos una realidad bastante llena de guerras que existen, aunque cuando estaba en el proceso de álbum y antes de realizar esta canción, fue en el momento en que surgió la guerra de Ucrania. Esto ha ayudado a que mucha gente piense en qué momento estábamos, y fue una noticia sobre cargante. También se añadía esta situación al cambio climático, a una crisis que parece que nunca se va a concluir. Tenemos muchas situaciones en la vida como para tener bajones, pero me parece que estamos llegando a algo insoportable.
En consecuencia, existen dos evidencias, como una, que te puedes enfrentar a esa realidad y hacer acciones, pero también hay tiempo en los que necesitas recular y sumergirte en el arte, o en un mundo interior que puedas alejarte de esta realidad que nos rodea. Creo que el arte está relacionado con la esencia y la pausa interior que puedes experimentar al contemplar las imágenes, música o más disciplina que lo conforman. Esta canción habla de ser el dueño de tu baile, de entrar en tu mundo interno y habla también sobre un personaje que brota encima del mar, algo que no tenga gravedad, que tenga su mundo propio y que esté disfrutando y envuelto de este mundo.
Ahora que me mencionas el mundo interior y tus letras están relacionadas con el mundo onírico, ¿Has tenido que viajar hacia ese mundo interno tuyo, para componer este disco?
Félix: En efecto, este álbum es un ámbito interno que me permite trasladarse al mundo externo para mí, sin embargo, se denomina así el disco, además de relatar otras vivencias reales. En mi primera canción, “Memories”, habla sobre el viaje de un migrante que nos ha contado un amigo en un concierto. Pero en el disco hay canciones anticapitalistas, pero también hay temas sobre la familia, la infancia y la pérdida de un ser querido. Es como si fueran trocitos de mi vida. En última instancia, es lo que me interesa para después encontrarme con las canciones en el directo; estas cosas son el punto de encuentro, para conectarte con esta canción y de esta forma hacer que alguien conecte con tu experiencia y lo que cuentas en un tema. Por consiguiente, parto de sucesos muy terrenales y reales que ocurren en el mundo exterior para intentar conectar con las sensaciones del mundo interior.
Personalmente, me gusta “The Reciver” junto a la de “Memories”…
Félix: Se trata de dos de las piezas más destacadas del álbum, las cuales poseen una estructura más progresiva debido a su identidad.
Como me has comentado que tienes raíces alemanas y vascas y ahora está lo del Benidorm Fest ¿Te presentarías en alguna ocasión presentada a España, Alemania o Francia?
Félix: Es difícil porque me siento vasco y soy vasco, pero entiendo que vivo en un país dividido en tres partes: La presencia de Navarra, Euskadi y la zona norte de Francia no ha sido tan evidente, dado que he mantenido una buena conexión tanto con el norte como con el sur. En caso de que llegara la oportunidad de presentarme a algún evento, sería el Benidorm Fest, con el fin de representar a España. En la actualidad, como elemento fundamental de mis composiciones, estoy cursando el inglés, pero estoy aprendiendo el euskera desde hace unos años, aunque soy un tanto vago en los idiomas debido a que no lo oigo de forma musical. Siempre tengo una gran cantidad de proyectos en la música y, por consiguiente, tengo menos tiempo para poder seguir aprendiendo el euskera, pero estoy en el proceso y a ver si algún día sorprendo con alguna canción en vasco.
Me comentas que te verías cantando en euskera en algún momento, pero y, ¿en español, lo harías?…
Félix: No lo descarto, aun así, no me resultaría tan difícil, solo con escucharme el acento que tengo, me daría muchos problemas.
Estás dentro del folk, rock y la electrónica ¿En qué ritmo te encuentras más cómodo? ¿Dónde te gustaría explorar para un futuro?
Félix: De toda la vida he tocado en bandas de rock, no obstante también de folk y electrónica, y composición en Francia, hemos podido hacer mezclas entre el folk y la electrónica, sin embargo, la electrónica pura y dura nunca he tenido la oportunidad de hacer y dónde me siento más cómodo sería el Rock. En el tema de “The Reciver” hay un trocito que sale la Bossa nova de Latinoamérica, por lo que no descartaría indagar por ese terreno, pero el futuro ya lo verá.
¿Con quién te gustaría colaborar en una próxima canción? Ya que en este has colaborado con Egyptology y, porque me mencionas al Arrebato…
Félix: No lo sé, no obstante, es posible que haya una colaboración pendiente con Miren Narbaiza de Mice, quien es una cantante del País Vasco, además de una amiga. Ahora viven en Gasteiz y sería ella la próxima colaboración que me gustaría ver en el disco; sin embargo, ya hemos hecho una colaboración como hace un año con Elena Setién, que es una cantante de Donostia y que entre los dos álbumes hemos sacado un solo.
¿Cómo surgió el tema con Egyptology?
Félix: El puente surge de la colaboración con el dúo francés de música electrónica, que siempre me ha agradado mucho. La vivencia es que conversando con mi hermano el productor acerca de “The Reciver”, donde tuve el placer de adquirir el trocito de la bossa nova, y lo que puedo apreciar es que nos incorporamos de esta manera y poco a poco entraremos en el mundo de la electrónica suave como Egyptology. Hay una cantante que me sorprende y voy a tirar por ese lado, por estas sensaciones y estos sonidos, y de ahí vino la colaboración de Egyptoloy. Por otro lado, mi hermano también me ha brindado la oportunidad de invertir un poco más en el proyecto y realizar los cuartetos de cuerda dentro del estudio, en lugar de utilizar algún programa que se encuentra para ello, así que pienso que ha ido bastante contratando este cuarteto porque le proporciona un aire distinto al disco.
Además, es la canción que más dura del disco, la de “The Reciver”…
Félix: Sí, porque es un viaje. Vinieron al estudio y pasamos dos días en buena compañía. También estuvimos probando los sintes de la casa y esto fue lo que forma el puente. Estoy muy contento con esta colaboración. También es una magnífica experiencia ver cómo trabajan ellos, ya que uno es productor. Stéphane Laporte es productor y utiliza mucho tipo de armonías que se escuchan en este puente, que suenan de manera extraña. Ha sido un placer ver cómo se compone esta canción.
Si tuvieras que definirte con tres temas tuyos, ¿Cuáles serían y por qué?
Félix: “Memories” es una canción que muestra el rock, la electrónica y la música contemporánea. La canción se usó recordando al compositor Olivier Messiaen, quien estuvo en la Segunda Guerra Mundial. La segunda canción sería “Where I Belong”, una canción más popera, con un tema más inspirado en los The Beatles. También conlleva el porte belong con esta guitarra afinada en Re, para sonar más abierta y, además, inunda los ritmos del pop y del folk. Y la última sería “Medication” del primer disco, “Medication” es un tema más americano, más country y conmigo siempre volveremos a los Beatles.
¿Qué nos estás preparando para los directos?
Félix: En primer lugar, presentaré el disco con banda, en una gira de las cuales ya se conocen las fechas y se pueden apreciar en mis redes sociales, en enero crearé una página web con el fin de centralizar un poco todo. En febrero volvamos a hacer una gira más española empezando por dar conciertos en las principales capitales de euskalherría y dentro de ello esperemos hacer una escapada junto al arrebato en Zaragoza.
Por último, Félix ¿Qué nos puedes contar de tus próximos proyectos?
Félix: Sí, en 2024 voy a trabajar más en mi proyecto Rüdiger. Estamos terminando la gira de Willis Drummond, Joseba no hay disco a la vista, Petit Fantôme hemos sacado disco, pero no habrá una fecha suelta. Por eso, ahora puedo presentar mi gira en España y Francia en el año 2024.
<<Para finalizar la entrevista, desde «AfondarenlaCultura» damos las gracias a «Rüdiger» por tu tiempo y dedicación y sobre todo disfrutar de su nuevo álbum «The Dancing King» y estaremos atentos a esos próximos proyectos.>>
